Resulta difícil empezar a explicar alguna cosa sobre Irán, los americanos y británicos lo sitúan en el llamado “eje del mal”, y en las noticias no para de hablarse del programa nuclear iraní. Pero cuando uno descubre el país todas las noticias de nuestros medios de comunicación occidental quedan atrás, el viajero descubre un país de gentes hospitalarias, curiosas por conocer al visitante < te interrogan por la calle y te preguntan cosas sobre ti, tu país, tu opinión sobre Irán, que te gusta > , un país con monumentos históricos deslumbrantes y paisajes preciosos que merece la pena visitar.

Quizá uno de los lugares más impresionantes que visitamos en Irán (agosto 2002) fue la fortaleza Arg-é Bam (ارگ بم en Persa) en plena Ruta de la seda, que fue destruida (parcialmente, totalmente?) por el terremoto que arrasó la región en diciembre de 2003. Un agrave perdida cultural para la humanidad, por no hablar del coste en vidas humanas y percances económicos.

Bam es única, no hay nada igual en todo el país. Bs una fortaleza construida con ladrillos de arcilla y paja (Adobe) a la que se le calculan unos 2000 años. Frente a la puerta de entrada a la ciudad, en el lado sur, el viajero no se imagina lo que encontrará en su interior. Hay que atravesar la puerta y subir a la muralla para poder contemplar la impresionante fortaleza. Al fondo se ve el castillo, desde el cual hay unas impresionantes vistas.

Para visitar Bam partimos de la ciudad de Kerman, a unos 200 Km de distancia. Kerman es la capital de la provincia del mismo nombre, situada al sudeste del país. La mayoría de los viajes organizados paran actualmente en Kerman donde hay diversos lugares de interés.

El Bazar de Kerman es especialmente interesante pues se dedica al comercio local, pero en un escenario de las mil y una noches. No dejéis de tomar un té o visitar los Baños.

Osos de Viaje