En esta entrada resumiremos el viaje a Finlandia y la escapada a Tallin que hicimos con nuestro hijo mayor cuando tenía dos años y medio. Viajamos con unos amigos que tenían dos hijas (de 12 y 6 años). Buscábamos un viaje tranquilo, lejos del calor del verano. Nuestro amigo Enric tenía ganas de ir a pescar en un lago, y de allí surgió la idea de viajar a Finlandia, porque Finlandia tiene muchos lagos. Buscamos una cabaña en plena naturaleza. Pero para no aburrirnos (que no nos aburrimos) decidimos hacer una escapada a la capital de Estonia (Tallin) que está muy cerquita de Helsinki, a menos de dos horas en Ferry.

¿Cómo viajar de Helsinki a Tallin?

Nuestro viaje empezó en Helsinki. Del aeropuerto tomamos nuestro coche de alquiler que utilizaríamos durante los 10 días de nuestro viaje. Del aeropuerto nos dirigimos directamente al puerto de Helsinki donde compramos los billetes del ferry que nos llevaría hasta Tallin, la capital de Estonia. La compañía de Ferries que escogimos fue: http://www.tallink.com/. Los billetes del ferry los compramos directamente en el puerto, porque pensamos que si los comprábamos por Internet desde casa y teníamos retraso con nuestro vuelo, perderíamos el ferry. El trayecto en Ferry que conecta Helsinki con Tallin es cortito, de unas dos horas de duración. A nuestro hijo le gustó mucho ver como entrábamos con el coche en el Ferry y una vez en el barco como salíamos del puerto de Helsinki. Llegamos sobre las 10 de la noche a nuestro apartamento situado en el centro de Tallin. Y como era verano, y estábamos en el norte de Europa, el sol no se había puesto aún.

Nuestro apartamento estaba situado en la plaza del ayuntamiento de Tallin, y tenía enormes ventanales sin persianas, por los que a las 4 de la mañana entraba un sol como el de medio día de España. El sol de madrugada nos molestó bastante durante los 3 días que pasamos en Tallin, porque no había manera de cubrir las enormes ventanas de nuestra habitación.

Sobre las visitas en Tallin…El primer día, en el casco antiguo de Tallin, visitamos la plaza del Ayuntamiento, donde estaba nuestro apartamento. Hicimos un paseo en el «Toomas the train», paseamos junto a la muralla medieval y visitamos la catedral de Alexander Nevski.

El segundo día cogimos nuestro coche de alquiler para visitar un museo etnológico el Estonian Open Air Museum situado a las afueras de Tallin. Fue una visita muy tranquila y relajada. Comimos allí y después de comer volvimos a Tallin.

Para esta parte del viaje, la escapada a Tallin, no era necesario el coche. De hecho tuvimos que pagar 2 días y una noche de parking. Dudamos en alquilar el coche al principio del viaje o alquilarlo después de volver de Tallin, para ir a la región de los lagos. Al final, decidimos alquilarlo por comodidad de los niños.

Vuelta a Finlandia. Hacia la región de los lagos. Parada en Porvoo

Tras pasar un par de días en Tallin, tomamos otro ferry a primera hora de la mañana que nos llevaría de vuelta a Helsinki. De allí viajamos unas 5 horas en coche para llegar a la Karelia finlandesa, la zona de los lagos, donde estaba nuestra cabaña. Hicimos una parada técnica en la ciudad de Porvoo, situada a una hora de Helsinki, donde paseamos por las casas rojas de la costa que están situadas junto al río Porvoo. Hicimos este paseo por el casco antiguo y alrededores de Porvoo. Aunque habíamos comprado provisiones en Tallin, también nos aprovisionamos en Porvoo.

Una semana en una cabaña en la región de los lagos en Finlandia

Pasamos una semana en una cabaña situada en medio del bosque junto al lago Saimaa. La cabaña tenía nombre. Se llamaba Villa Mustikka, que en finlandés quiere decir mora, porque en el bosque que circundaba la casa había un montón de moras y frambuesas con las que preparamos unos pasteles buenísimos. Los vecinos más próximos, estaban a unos 500 metros y eran los propietarios de la cabaña. Para llegar hasta villa Mustikka se accedía por un camino de tierra sin asfaltar. La ciudad más próxima, Savonlinna estaba a una hora de coche. En definitiva, un lugar muy tranquilo. Villa Mustikka contaba con un embarcadero y una barca con motor que utilizábamos para pasear por el lago y pescar. También tenía un arenero para los niños y barbacoa. Desde el comedor de la casa se veían unas puestas de sol larguísimas.

Visita a Savonlinna

Uno de los día decidimos ir a comprar provisiones y de paso visitar la ciudad próxima de Savonlinna. Savonlinna es una pequeña ciudad situada junto a un lago con un castillo medieval, el castillo de Olavinlinna. Pasamos una mañana en la ciudad y visitamos su castillo.

Impresiones del viaje

El viaje no se hizo nada pesado para nuestro hijo. Los únicos días más complicados fueron el primero, el que volamos de Barcelona a Helsinki y tomamos el Ferry para llegar a Tallin y el último porque tuvimos que conducir 5 horas de Villa Mustikka hasta helsinki y tomar el avión de vuelta. A pesar, de que estos días fuero cansados para nosotros, como el durmió en el coche y en el avión no notó el cansancio del viaje. En Finlandia apreció mucho el contacto directo con la naturaleza y en nuestra escapada a Tallin disfrutó en el Estonian Open Air Museum.

PLAN DEL VIAJE

Día 1: Vuelo Barcenola – Helsinki con finnair. Recogida del coche de alquiler en el aeropuerto de Helsinki. Traslado al puerto de Helsinki para tomar el Ferry hacia Tallin. Llegada a Tallin por la noche.

Día 2: Visita del casco antiguo de Tallin.

Día 3: Visita del Estonian Open Air Museum (a las afueras de Tallin). Por la tarde paseo por el casco antiguo de Tallin.

Día 4: Ferry Tallin-Helsinki. Viaje en coche hasta la cabaña situada en la karelia finlandesa. Parada técnica en Porvoo.

Días 5-11: Estancia en cabaña cerca del lago.

Día 11: Regreso en coche al Aeropuerto de Helsinki. Vuelo de vuelta a Barcelona.