Continuamos por la ruta dravidiana. Nos dirigimos hacia Thanjavur una joya del sur de la India que no debéis perderos. Destaca el asombroso templo de Brihadishwara o simplemente el “templo grande” y el complejo del palacio real donde se expone una importante colección de figuras de dioses hindús hechas en bronce.
El templo grande de Thanjavur (o Tanjore) fue construido durante la dinastía de los Cholas que gobernaron el sur de la India entre el siglo XII y el XIII d.c. Los Cholas unificaron el sur de la India bajo un único gobierno y durante esta época floreció el arte, la religión y la literatura de la zona como nunca antes. Nosotros visitamos el templo dos veces, la primera al atardecer con una preciosa puesta de sol y con una intensa actividad humana y la segunda a primera hora de la mañana, cuando el templo estaba prácticamente desierto.


Desde Tanjore nos dirigimos a Trichy (o Tiruchirapalli) donde visitamos el Rock Fort Temple. El templo dedicado a Ghanesha se encuentra situado en la cima de una colina de unos 80 metros, desde donde el dios con cabeza de elefante protege la ciudad. La ascensión al templo es de lo más curiosa, puesto que se tienen que atravesar un par de cuevas en las que hay pequeños templos que datan del siglo VII.
Seguimos hacia el lejano sur hasta llegar a Madurai. La ciudad es un centro de comercio importante de la región y mantiene la esencia de la India en todos los sentidos. Madurai es famosa por el complejo de templos llamado Meenakshi, construidos durante el periodo Kayak (s. XVI-XVIII). Se trata de un complejo enorme dedicado a Shiva famoso por sus “gopuras” o torres pintadas con figuras de dioses y demonios. En Madurai también visitamos el palacio Tirumala Kayak.

Desde Madurai nos dirigimos hacia el oeste hacia el parque nacional de Periyar, uno de los parques más importantes de la India. Se encuentra la frontera entre los estados del Tamil Nadu y Kerala en una zona montañosa. Para llegar hasta Periyar atravesamos plantaciones de te con paisajes expléndidos. En el parque se pueden ver fácilmente elefantes y otros animales como el tigre de bengala, aunque para ver tigres nos dijeron que era necesario hacer una excursión nocturna. En Periyar nos alojamos en la “Spice Village”, que consta de una cincuentena de casitas en medio del bosque inspiradas en las construcciones típicas de la zona.
De Periyar nos adentramos en la provincial de Kerala hasta llegar a Kamurakom. En Kamurakon hicimos una excursión por los canales o “backwaters” de Kerala, una experiencia inolvidable. Los backwaters son canales o riachuelos de agua rodeados por una frondosa vegetación tropical. A ambos lados del canal se pueden ver casas rurales donde la gente realiza las tareas de la vida cotidiana. Los paisajes cambian constantemente: desde campos completamente verdes, pasando por granjas, pescadores, gente lavando la ropa en el río etc.
Una de las actividades que se pueden hacer en Kerala es un masaje ayurveda, una técnica antiquísima de masaje que se cree tiene unos 3000 años de antigüedad. En el masaje se utilizan aceites vegetales con aromas muy peculiares.
Nuestra última parada acaba en la ciudad de Kochi (Cochin), una de las ciudades más visitadas de Kerala. Allí visitamos las redes chinas de pescadores, la iglesia de San Francisco, el palacio holandés y la sinagoga. Personalmente la visita más interesante fue al puerto para ver la redes de pescadores, que se dice fueron introducidas por la corte de Kublai Khan.

